En los años 1967 y 1968, Edmund Phelps (1933) y Milton Friedman (1912) (al día de hoy ambos nobeles) se dieron cuenta de que esta relación no siempre se cumplía y tampoco para todos los países. Lo que pasaba era que la gente no es tonta y no toma sus decisiones respecto del salario nominal (cantidad de $), sino que toma en cuenta el salario real (cantidad de bienes que puede comprar con determinados $). La curva de Phillips original funcionaba porque el período de análisis era de estabilidad de precios, durante el cual a l no haber inflación
En definitiva de lo que se dieron cuenta fue que en el corto plazo puede existir una interacción entre inflación y desempleo, pero en el largo plazo la gente adapta sus expectativas a la inflación. El corto plazo es el período en el cual las expectativas de inflación no han sido totalmente incorporadas, una vez que estas se internalizaron, la caída en el desempleo provocada por la inflación desaparece. Con las expectativas adaptables, a medida que va pasando el tiempo y que las personas renegocian sus contratos laborales , van incorporando la inflación producida. El gobierno solo podrá con la política económica disminuir temporalmente la tasa de desempleo. Gráficamente en el corto plazo hay varias curvas con pendiente negativa como en la del gráfico anterior, pero en el largo plazo la curva se transforma en una vertical, clavada en la tasa natural de desempleo.
El mecanismo para disminuir el desempleo es producir una caída en el salario real.
Una alternativa al modelo original de Phillips es considerar la tasa de inflación en lugar de la tasa de variación de salarios. En Argentina el gráfico para el lapso 1980-1995 es el siguiente: