Los economistas tienen distintas formas de enfrentar un problema. Una es basarse únicamente en las matemáticas (funciones, derivadas, equilibrios, etc.). Otra es usar la intuición, relacionar una variable con otra sin detallar matemáticamente el modelo. Existe una intermedia que ocupa las dos formas anteriores para explicar la realidad, y es la que aplica todo economista serio.
En la política monetaria se presenta el problema de que no se conoce la demanda de dinero, por lo cual hay que estimarla, al respecto leemos en el sitio del BCRA lo dicho por Martín Redrado:
En la política monetaria se presenta el problema de que no se conoce la demanda de dinero, por lo cual hay que estimarla, al respecto leemos en el sitio del BCRA lo dicho por Martín Redrado:
Mi mensaje es: usar los modelos pero no limitarse a ellos ni confiar ciegamente en los pronósticos que arrojan. Es decir, lo que denomino escepticismo constructivo: la duda sobre el modelo no implica rechazarlo de plano, sino tomarlo como un insumo más en el proceso de formulación de la política económica.
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